Naturaleza, La Manifestación Fisica De La Mente De Dios, por Linda Dierkz – Septiembre 2019

Naturaleza, La Manifestación Fisica De La Mente De Dios, por Linda Dierkz

nature is god

Y no olvides que la tierra se deleita en sentir tus pies descalzos
y los vientos anhelan jugar con tu cabello.
— Kahlil Gibran

Una de mis más grandes bendiciones fue crecer en la zona rural de Vermont en una familia que amaba el aire libre. Mis recuerdos son un caleidoscopio de fogatas, malvaviscos asados, picnics, pescar, recoger manzanas, pasear en trineo, cortar nuestros propios árboles de Navidad y el dulce aroma del jarabe de arce hirviendo.

Las cuatro generaciones de antepasados antes que yo fueron de granjeros que vivieron con el ritmo contínuo y el latido de la tierra. La Naturaleza y la Tierra están en mi médula, en mi material genético.

Mi vínculo con la Naturaleza ha permanecido hasta mi edad adulta en que me volví una excursionista ávida. Cada mañana completo mi meditación con una caminata, creando una transición dulce entre los mundos etéreo y físico. Las mañanas en las montañas me recuerdan que todo lo que me rodea es la manifestación de un plan divino. Cuando uno siente la Naturaleza, ve la cara de Dios.

LA CHISPA DE LA NATURALEZA DE LO DIVINO

La naturaleza no tiene concepto del tiempo, simplemente cumple sus ciclos, con ritmo estable que crea equilibrio perfecto y armonía. La naturaleza constantemente se renueva en ciclos contínuos de muerte y renacimiento, deterioro y cosecha. La naturaleza enseña que nosotros, personalmente, creamos crecimiento a partir del cambio, y la transformación que resulta llega cuando no interferimos y se renueva otra vez. La palabra naturaleza viene del latín natura, que en la antigüedad significaba “nacimiento.”

Pasar tiempo en la naturaleza te permite ver la grandeza del universo y expandirte en su eternidad. Cuando nos volvemos parte de ella y obtenemos una visión más amplia, vemos prototipos duraderos de la naturaleza. Recuerdo a mi mamá y a mi juntas deshierbando el jardín con nuestros dedos rápidos y experimentados, como lo hicieron las mujeres siglos antes de nosotras, entrelazándonos así en un patrón antiguo. Todos nosotros somos parte de este patrón infinito.

La próxima vez que estés en la naturaleza, cierra los ojos y entra en la quietud. Salte de lo físico y mírate como parte de algo más grande. Vas a encontrar simetría entre tu perfección interna y tu expansión externa como parte del plan divino. Permanece en esta quietud y sentirás tu unidad con la fauna y la flora al perder tus límites físicos y unirte con el universo infinito.

Dios al expresarse a través de la naturaleza es infinitamente fértil. Cada primavera el mundo se renueva en billones de expresiones individuales para crear un todo abundante. Los arroyos corren, llevando nutrición a las plantas y los animales, cada uno en sintonía con el otro en relación perfecta y en el orden correcto. Los ojos de mi abuelo brillaban cuando hablaba de la gracia de Dios manifestada en sus plantas de frambuesas “cargadas de fruto.”

La naturaleza ofrece una oportunidad ilimitada de descubrimiento y expansión espiritual, abriendo nuevos aspectos tuyos y aumentando tu aprecio por ti mismo, y una mayor conexión con tu fuente. La maravilla del descubrimiento alimenta esta expansión cuando encuentras tesoros físicos y ves su belleza. Entre mis tesoros está la mandíbula de un coyote, nidos de pájaros y un cascarón de huevo de un halcón de cola roja. He visto salir el sol y la luna ocultarse simultáneamente, y arcoiris dobles sobre mi casa. Estos son una fuente de inspiración.

Prueba esto: La próxima vez que estés en la naturaleza, fíjate como la vida silvestre hace una pausa y te nota a ti. Luego siéntate en la quietud y el silencio – piérdete en la mente única – y notarás como los conejos y los pájaros vuelven a su actividad normal cuando tú te conviertes en parte de la corriente.

Ralph Waldo Emerson dijo, “El mundo físico es puramente un símbolo del mundo espiritual.” Cuando buscas las cualidades divinas en la naturaleza, tu propia conciencia se expande. Existen muchos caminos a la expresión más alta, pero creando una relación con la naturaleza provee uno más corto. Busca la belleza del mundo físico. Interactúa.

La naturaleza siempre está en equilibrio, en ritmo, en un patrón perfecto en movimiento constante. La naturaleza crea esa sensación de llegar a casa, de explorar y volver a casa otra vez.

CONEXION CON NUESTRO CREADOR EN LA NATURALEZA

La naturaleza es vitamina N – orgánica, disponible inmediatamente, de acción inmediata y libre, alimento para tu salud y bienestar. El tiempo en la naturaleza calma la mente y repara el cuerpo. Eleva tu estado de ánimo, fortalece tu sistema inmunológico, aumenta tu creatividad, alivia el estrés, libera el trauma y te hace sentir más vivo y vital. Deepak Chopra afirma que la naturaleza “te restaura, refresca y vigoriza.”

La naturaleza es un lugar de soledad y espacio que nos conecta con nuestro Creador. Nos regresa a nuestro verdadero ser y a nuestro bienestar innato perfecto, esa chispa de divinidad que no puede ser tocada por la pena o el sufrimiento. Es un lugar de pureza, gozo y belleza donde puedes dejar tu cerebro fuera del camino, libre de la gente, trabajos y presión. Tu ambiente natural te proporciona la conciencia instantánea para aliviar el estrés y la ansiedad, eleva tu frecuencia e impulsa tus habilidades intuitivas.

Interactúa con la naturaleza y reclama esta abundancia. Da un paseo, medita caminando. Combina la naturaleza con tu expresión creativa – pinta, fotografía, canta al aire libre. Cultiva algo. Mete las manos en la tierra; huele la tierra.

INCORPORA LA NATURALEZA DONDEQUIERA QUE ESTES

Si pasas horas en un ambiente de oficina, toma descansos para mirar por la ventana o sal a refrescarte mirando al cielo, las nubes, los árboles. Crea un diseño de naturaleza en el lugar de trabajo con una variedad completa de luces o pinturas o fotografías de escenas naturales. Incorpora materiales naturales como madera o piedra en tu oficina o edificio. Incorporar una estética natural en el lugar de trabajo mejora el estado de ánimo y aumenta la creatividad y la productividad.

¿Vives en la ciudad? No hay problema. Toca música de fondo con cantos de pájaros y observa una puesta de sol. Pon flores frescas en tu casa. Siembra hierbas como la menta y la albahaca y otras que puedes incluir en tu dieta para absorber su energía vital. Visita los parques públicos. Camina descalzo en la hierba y siente la energía de un árbol. Tu cuerpo es poroso para tu ambiente energético. El Shimrin-yoku (baño en el bosque) y el contacto con la tierra se están volviendo piedras angulares para la salud y la curación al permitir la absorción de las energías de la Tierra.

En la antigüedad, estábamos constantemente conectados con la Tierra por medio de nuestros pies descalzos o sandalias con suela de cuero. Pero los zapatos en la actualidad y los materiales de los edificios nos aíslan de la energía enriquecedora de la Tierra. Este ambiente energético, conocido como las resonancias Schumann, vibran en la misma frecuencia que nuestros corazones y cerebros, por lo cual cuando te sincronizas con estas frecuencias, llegas a armonizarte contigo mismo y con el campo universal.

El contacto con la Tierra es esencial en el medio ambiente actual en el que estamos expuestos a una cantidad creciente de frecuencia electromagnética tóxica. Nuestro apego perpetuo a los teléfonos celulares, computadoras, WiFi y micro ondas ha sido ligado a la fatiga, al cáncer, la depresión y la ansiedad. El contacto con la tierra mitiga esta contaminación por medio de la transferencia de electrones benéficos al cuerpo. Pasar cualquier cantidad de tiempo en un lugar con tierra es beneficioso pero 20 a 30 minutos al día es óptimo.

Durante mis épocas obscuras personales de cáncer y depresión, mis paseos en las montañas se convirtieron completamente en mi santuario, mi consuelo y mi seguridad. Me proporcionaron comunicación con la Tierra y un compañerismo tranquilizante con una presencia más alta que me permitió liberar el trauma, aliviar mi depresión y, al final, la recuperación de mi salud. Yo soy una prueba positiva.

EL RESPETO A NOSOTROS MISMOS Y A LA TIERRA

La fe sabe que el universo es un Sistema Espiritual,
que el hombre es parte de este sistema.
— Ernest Holmes

Aceptar que somos una mente es aceptar que somos inseparables de nuestro ambiente físico. Aceptar que somos uno con nuestra fuente es ofrecer a nuestro ambiente la misma reverencia y respeto con el que nos tratamos nosotros mismos.

Vemos la naturaleza como auto-renovación y auto-limpieza – pero estamos perjudicando el sistema. Las Naciones Unidas informan que nuestro medio ambiente está en un estado más vulnerable que nunca. Estamos intrínsecamente entrelazados con nuestros recursos naturales y dependemos de ellos para nuestra existencia misma. Debemos valorar y cuidar nuestro medio ambiente si queremos que nuestro planeta continúe manteniéndonos. No debemos menospreciar lo que nos sostiene.

Nuestros recursos naturales son la cadena de abastecimiento de nuestra vida, desde el agua que bebemos hasta los alimentos que comemos y el calor del sol. Piensa en forma íntegra y reduce al mínimo tu huella en el paisaje. Cada vez que reciclas, que eliminas los artículos de plástico de un solo uso o recojes la basura, estás realizando un acto espiritual.

Emerson dijo, “La naturaleza siempre usa los colores del espíritu,” y no es coincidencia que nuestro Creador pintó la naturaleza de verde, el color de nuestra chacra del corazón, para recordarnos su amor constantemente. Corresponde a ese amor. Que la naturaleza sea tu lugar de culto. Cada mañana, al volver de mi caminata, encuentro las huellas que dejé al salir y sé que soy una persona diferente de la que las dejó: mucho más sabia y enriquecida por este tiempo con mi Creador.

Deja que la naturaleza te llene con su abundancia espiritual, y se derramará en todas las áreas de tu vida.
_________________________
Traducción: Rev. Martha Topel
CSL, Redondo Beach, CA

 


2020-11-24T11:55:20+00:00
Go to Top